Cuidado con lo que te recetan

Steven Soderbergh dirige Efectos Secundarios. Es el último trabajo de este director nacido en Atlanta (Estados Unidos) y ganador de un Óscar al mejor director por su largometraje Traffic antes de su retirada del cine y no defrauda, impacta. Un thriller dramático con una elegante dosis de misterio, una cuidada puesta en escena y un acertado reparto con Jude Law, Rooney Mara, Catherine Zeta-Jones y Channing Tatum que mantienen al espectador enganchado, con la inevitable necesidad de descifrar  cada una de las tramas del guión. Un guión de Scott Z. Burns cargado de intriga, deslealtad, muerte y pastillas milagrosas.

El Dr. Jonathan Bank y la Dr. Victoria Siebert

Ambientada en el mundo de la psicofarmacia, ofrece una historia que conciencia o reflexiona sobre lo difícil que es detectar y superar una depresión, indagar en la mente de una paciente. Lo que empieza como un drama sobre una mujer depresiva y su supuesto intento de homicidio, junto con la ayuda de un psiquiatra mediante antidepresivos con el único objetivo de ganar dinero, pasa a convertirse en un sorprendente thriller en el que las apariencias engañan y cada una de las piezas encajan repentinamente.

Emily y Martin

La película nos presenta a Emily y su marido Martin, una pareja de enamorados que deberían ser felices pero su mundo se desmorona cuando ella intenta suicidarse, sufre ataques de ansiedad. Incapaz de seguir adelante cuando él regresa a casa tras pasar unos años en prisión acepta seguir un nuevo y novedoso fármaco recetado por su psiquiatra el Dr. Bank, un antidepresivo experimental. La joven promete mantenerse bajo su supervisión a cambio de no ser ingresada de manera indefinida en un psiquiátrico, utilizándola como “cobaya” para calmar su ansiedad. Lo que al principio parece recuperar la armonía de la pareja y mejorar el comportamiento drástico de Emily, los efectos secundarios de la medicación conducen a un inesperado suceso amenazando las vidas de varios implicados.

Emily en el Hospital

Un drama que mantiene al espectador seducido por el transcurrir de los acontecimientos de principio a fin, disfrutando de la trama principal y los giros argumentales en una historia retorcida. Uno se pregunta ¿qué le pasa a Emily?, ¿quién ha matado? y ¿qué sucederá ahora?. Adentra sutilmente al espectador en un relato con final sorpresa.  
                      
Sin duda, una brillante obra donde Soderbergh juega al despiste con un excelente guión.